En el cristianismo:
La Escritura no ordena que los cristianos ayunen. No es algo que Dios requiera o demande de los cristianos. Al mismo tiempo, la Biblia presenta el ayuno como algo que es bueno, beneficioso y esperado. El libro de Hechos registra el ayuno de creyentes antes de hacer decisiones importantes (Hechos 13:4; 14:23). El ayuno con frecuencia va ligado a la oración (Lucas 2:37; 5:33). Creemos casi siempre que el objetivo del ayuno es la falta de alimento. En cambio, el propósito del ayuno debe ser quitar tus ojos de las cosas de este mundo y concentrarte en Dios. El ayuno es una manera de demostrar a Dios, y a ti mismo, que tomas en serio tu relación con Él. El ayuno te ayuda a obtener una nueva perspectiva y una renovada confianza hacia Dios.
En el islam:
Significado del Ramadán y del Ayuno
La Escritura no ordena que los cristianos ayunen. No es algo que Dios requiera o demande de los cristianos. Al mismo tiempo, la Biblia presenta el ayuno como algo que es bueno, beneficioso y esperado. El libro de Hechos registra el ayuno de creyentes antes de hacer decisiones importantes (Hechos 13:4; 14:23). El ayuno con frecuencia va ligado a la oración (Lucas 2:37; 5:33). Creemos casi siempre que el objetivo del ayuno es la falta de alimento. En cambio, el propósito del ayuno debe ser quitar tus ojos de las cosas de este mundo y concentrarte en Dios. El ayuno es una manera de demostrar a Dios, y a ti mismo, que tomas en serio tu relación con Él. El ayuno te ayuda a obtener una nueva perspectiva y una renovada confianza hacia Dios.
En el islam:
El Mes de Ramadan
El Ramadán es el Noveno Mes del calendario lunar islámico y puede durar entre 29 y 30 días. Un mes islámico lunar empieza cuando se ve el nuevo cuarto creciente en el horizonte occidental, justo después de la puesta del sol. Los musulmanes miramos al oeste buscando la luna nueva el 29º día del Octavo Mes. Si se avista la luna nueva es que ha empezado el Ramadán con la puesta, pero se empieza a ayunar al amanecer siguiente. Si no se ve la luna nueva en este vigésimo noveno día, los musulmanes terminamos los 30 días del Octavo Mes, y el Ramadán empieza entonces al día siguiente.
Dios dice en el Corán:
“¡Creyentes!. Se os ha prescrito el ayuno, al igual que se prescribió a los que os precedieron. Quizás, así temáis a Dios”.
2:183
“¡Creyentes!. Se os ha prescrito el ayuno, al igual que se prescribió a los que os precedieron. Quizás, así temáis a Dios”.
2:183
“Es el mes de Ramadán, en que fue revelado el Corán como dirección para los hombres y como pruebas claras de la Dirección y del Criterio (distinción entre el bien y el mal). Y quien de vosotros esté presente ese mes, que ayune en él. Y quien esté enfermo o de viaje, un número igual de días. Dios quiere haceroslo fácil y no difícil. ¡Completad el número señalado de días y ensalzad a Dios por haberos dirigido!. Quizás, así, seáis agradecidos”.
2:185
2:185
Por consiguiente al mes del Ramadán se le llama el mes del Corán y, por tanto, los musulmanes tenemos la tradición de recitar el Corán a menudo durante este mes.
Ayuno
Se empieza a ayunar desde el alba hasta la puesta. Los musulmanes nos levantamos de madrugada, tomamos el almuerzo previo a la aurora y bebemos algo para preparar el ayuno. Dejamos de comer y de beber al amanecer. Durante el día no se permite comer, ni beber, ni actividad sexual alguna. Por ende, el musulmán debe seguir estrictamente el código moral islámico. De lo contrario, se violarían los requisitos del ayuno.
El ayuno en el mes del Ramadán es uno de los credos que se exige a todos los musulmanes que hayamos alcanzado la pubertad. Las mujeres que estén en su período menstrual o que no se hayan recuperado aún del parto retrasan el ayuno hasta que hubieran remitido tales circunstancias especiales. Además, quienes estén enfermos o de viaje pueden optar por retrasar su ayuno.
Los musulmanes ayunamos porque Dios lo ha ordenado. No obstante, también hay que tener en cuanta los beneficios del ayuno, como el desarrollo del control sobre el hambre, la sed y las necesidades sexuales, tratando de ser una persona de buena moral y demostrando sinceridad ante el Creador. Durante el ayuno, los musulmanes podemos llevar a cabo nuestros asuntos cotidianos como de costumbre. No obstante, en los países islámicos se recortan dos horas diarias de la jornada laboral y se altera la jornada para hacer el trabajo más cómodo.
El ayuno se rompe justo tras la puesta del sol tomando generalmente dátiles y agua o zumos, cuando llama el almuédano. No obstante, cualquier comida o bebida legal se puede emplear para romper el ayuno, y el desayuno empieza después de la Oración de la Puesta con una comida completa. Tras un breve descanso, los musulmanes vamos a la mezquita para la Oración de la Noche, y después a una Oración Nocturna Especial.
En el judaismo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario